Lentejas de mamá

¡Hola!

La receta de hoy va dedicada a todas las mamis del mundo y, sobre todo, a la mía, ¡que la quiero mucho! Hoy vamos a aprender uno de esos platos que a muchos no les gustaba nada de pequeños pero que había que comerse porque mamá decía que tenía mucho hierro (muy necesario para crecer fuertes, claro). Y digo que a muchos no les gustaban, ¡pero a mí me volvían loca! No había vez que no repitiera dos o tres veces y lamiera el plato hasta dejarlo brillante. Quizás la razón de que me volvieran tan loca era la receta... la receta maravillosa que se han pasado de madre a hija en mi familia. ¡Y yo hoy la voy a compartir con vosotros!

Digo receta maravillosa heredada, pero vamos, que viene a ser la receta de toda la vida. La que sale bien solo si se hace con mucho amor. Y bueno, a veces es necesario cambiar un poco los ingredientes exóticos, la quinoa, la espelta, el trigo sarraceno, la leche de arroz, las semillas raras... por un buen chorizo. Parece que las recetas modernas son mucho más ricas solo por llevar nombres kilométricos y pasamos un poco de las cosas tan deliciosas que nos hacían nuestras abuelas y nuestras queridas mamis... así que hoy, ¡lentenjas!

Aunque tengo que decir, que he añadido algo fuera de lo común: el alga kombu. Totalmente opcional pero muy recomendable. No aporta nada en sabor (vamos, que no se nota) pero ayuda a nuestro organismo a absorber todo el hierro y además, nos libra de recurrir posteriormente al Aerored. ¡Un alga fantástica, vamos! ¿Y lo mejor? La mejor variedad se encuentra en Galicia (¡cada día máis linda máis linda!) (¡y el mejor pimentón también! : P).

Por cierto, han subido algo las temperaturas pero que eso no os quite de prepararlas, los abuelos nunca se equivocan y el mío se tomaría un buen cocido en pleno agosto y a 40º. Yo, como lo admiro mucho y quiero ser como él, estoy todo el verano pensando en lo mucho que echo de menos comerme un buen caldo ¡Ay! Es que está tan rico...

Como todas las cosas que subo, estas son también muy fáciles (y es que no pueden ser muy difíciles porque... no sé hacer cosas muy difíciles). ¡Intentadlo porque os gustarán mucho!

Lentejas de mamá

Ingredientes:

- 4 zanahorias medianas tirando a grandes

- 1 cebolla

- 1 pimiento rojo mediano/grande

- 2 chorizos (que sean buenos, los de lomo son muy ricos y no son muy grasientos)

- Unos 250gr de bacon

- 3 o 4 patatas medianas 

- Entre 275gr y 300gr de lentenjas

- Alga kombu

- Aceite de oliva

- 1 cucharadita de pimentón picante

- Sal

Preparación:

1. Cortamos la zanahoria (pelada), el pimiento rojo, el chorizo y el bacon.
2. Lavamos las lentejas y las ponemos en una olla.
3. Echamos la cebolla entera pelada. 
4. Echamos todos los ingredientes menos la patata (incluida el alga, la sal, el aceite y el pimentón).
5. Echamos agua hasta que cubra al menos 2 o 3 dedos sobre los ingredientes.
6. Ponemos a fuego fuerte hasta que rompa a hervir, en ese momento bajamos a fuego lento y tapamos. 
7. Mientras se van haciendo los ingredientes, pelamos y cortamos la patata en dados.
8. Cuando las lentejas estén un poco blandas (pero que todavía no estén hechas), más o menos a la media hora o 40 minutos de cocción, echamos las patatas. En este paso está bien probar el caldo para comprobar si necesita más sal o más pimentón.
9. Dejamos otros 10 - 15 minutos hasta que lentejas y patatas estén blandas.

¡Pues nada, que hay lentejas, si quieres las comes y sino las dejas! (¡Mima! ¡Me he tirado toda la semana intentando acordarme de esta frase! ¡Qué triste! Jaja)

¡¡Un besiño a todos pero en especial a mi mami!!

Lucía